Que el espacio de trabajo sea ergonómico es crucial para cuidar de la salud de los trabajadores y minimizar el riesgo de lesiones y accidentes laborales. La ergonomía no solo engloba el mobiliario, también está presente en nuestras posturas y la manera en la que nos movemos durante el día, desde cómo nos sentamos en la silla hasta cómo nos reunimos, nos movemos por la oficina o nos relacionamos con nuestros compañeros.
¿Por qué es importante la ergonomía en el trabajo?
Acondicionar nuestro espacio para sentirnos bien a nivel físico, anatómico y psicológico es esencial para gozar de una buena salud. Evitar el sedentarismo, la fatiga ocular o el estrés no solo tiene un impacto en nuestra productividad laboral, también en nuestra vida personal y en nuestro bienestar. Pero pensar que ergonomía es sentarse correctamente en una silla es un enfoque que se queda muy corto...
Tipos de ergonomía laboral
Ergonomía física. Se refiere al mobiliario, materiales y herramientas que necesitamos, así como nuestra postura mientras los utilizamos.
Ergonomía ambiental. Engloba el tipo y la cantidad de luz, el ruido y la temperatura del espacio.
Ergonomía cognitiva. Los factores que aumentan o disminuyen el estrés de los trabajadores. Por ejemplo, la carga de trabajo, el proceso de toma de decisiones, el impacto psicológico de algunas tareas, etc.
Ergonomía organizacional. Aquí se incluye la relación del trabajador con la empresa y sus compañeros, la política de la empresa, la comunicación interna, el horario, etc.
¿Quién se ocupa de la ergonomía en el trabajo?
Por un lado están todas aquellas empresas y profesionales encargados de elaborar herramientas con un diseño ergonómico y adaptado a los espacios de trabajo. Y, por otro lado, están los profesionales de Prevención de Riesgos Laborales. El equipo de PRL es el encargado de llevar a cabo una ergonomía preventiva, es decir, el estudio y análisis de las condiciones de seguridad, confort y salud, así como de explicar dichas normas al personal. Por otro lado, no siempre se pueden prever todas las situaciones y, a veces, surgen problemas que hay que remediar. En este caso se realiza una ergonomía correctiva que soluciona los problemas que los trabajadores experimentan en el día a día y no estaban contemplados en ningún sitio. El departamento de PRL puede ser interno, como parte del personal de la empresa, o externo, si se subcontrata a una empresa específica para esta tarea.
¿Cómo podemos evitar riesgos relacionados con la ergonomía en el trabajo?
- Diseñando un plan de riesgos que incluya todos los tipos de ergonomía.
- Formando a los trabajadores para que sean conscientes de la importancia y el impacto que tiene en su salud y sepan realizar sus tareas de la mejor forma posible.
- Utilizando mesas, sillas y herramientas adecuadas, que se adapten a los trabajadores y les permitan estar en una postura cómoda.
- Facilitando el cambio de postura durante la jornada, añadiendo movimiento para evitar todos los riesgos asociados a posturas sostenidas durante largos periodos de tiempo.
- Añadiendo espacios dedicados al descanso activo y la relajación.
Como ya hemos comentado, existe un marco legal y un departamento encargado de dichas tareas. Sin embargo, todos somos responsables de nuestra propia salud y en nuestra mano está el trabajar de una manera que nos beneficie y no empeore nuestra calidad de vida. No dudes en comentar con tu empresa todas aquellas herramientas que te vendrían bien y en hacer todo lo que esté en tu mano para añadirle dinamismo a tu jornada.